¡La cosa viene mala! ¡Viene un cambio de moneda! ¡Dicen que…!
Todos decimos, todos esperamos, pero muchos no sabemos qué. En estos días previos a la Navidad, que se llaman de Adviento, la Iglesia invita a preparar el corazón.
Una de las claves de esa preparación es la búsqueda de la Paz con Justicia:
El corazón debe estar en paz con los propios errores, con nuestras frustraciones y virtudes al igual que con las de los demás. Esto no se puede lograr sin buscar la justicia: en lo que prometemos y lo que cumplimos, en lo que cobramos y pagamos, en los que nos cobran y nos pagan, en lo que decimos y nos dicen, en lo que hacemos y nos hacen…: ¿cómo puedo estar en paz con mi vecino si le robo, cómo puede estar en paz el trabajador sin el salario justo, o la pareja si se es infiel?… El Adviento es una invitación a no dejar las cosas como están, sino a buscar mejoras en esos “pendientes” que todos tenemos. Muchos de los conflictos generados por estas preguntas sin responder no se ven. En esos casos estamos viviendo la paz de los sepulcros no la Paz que trajeron los ángeles a los pastores la noche de Navidad.
Paz con Justicia: ¡da un paso hoy!.
Sin Justicia no hay Paz.
Que la Navidad sea un renacer para cada uno y como dice Sergio a buscar resolver los «pendientes»
El pasado es historia, el futuro no existe, vivamos el hoy a plenitud con nuestro Senor y que mejor momento que la Navidad para comenzar.
Este tienpo de navidad tienpo de adviento es
para prepararnos para la venida del nino jesus
dejar rencores tienpo,de cambiar ser mejores hijos de dios padre y tiempo de perdonar enfin
tiempo de cambio total y sincero ycomo dise el comentrio anterior de Aymee valdes el pasado es
historia hay que vivir el precente por que el futuro no existe el mejor momento es el de la
navidad a vivirla aplenitud con el senor
armndo andrade